lunes, 25 de febrero de 2013

Hoy me dió por pensar....



Ahora, en las vísperas cercanas a mi vigesimoctavo cumpleaños, me dio por pensar, me acordé de algo que leí hace tiempo y he decidido reflexionar sobre ello, muy acorde llegado a este punto, en este interludio donde se confunde la adolescencia y se muestra firme la adultez.







-Gato de Cheshire, ¿podrias decirme, por favor, qué camino debo seguir para salir de aquí?- dijo Alicia
-Esto depende en gran parte del sitio al que quieras llegar - dijo el Gato.
-No me importa mucho el sitio... -dijo Alicia.
-Entonces tampoco importa mucho el camino que tomes - dijo el Gato.
- ... siempre que llegue a alguna parte - añadió Alicia como explicación. 
- ¡Oh, siempre llegarás a alguna parte - aseguró el Gato -


 

Está claro, todos los caminos llegan a algún lado, pero ¿Dónde quieres llegar tu?, ¿Qué camino deseas escoger?, hay que luchar y ser integro para completar el camino elegido, encontrarás obstáculos y caerás repetidas veces, hay que saber levantarse y continuar pero siempre teniendo en cuenta y presente que el camino más fácil, rápido u obvio no es siempre el correcto.

El “me da igual” o la incertidumbre no es una opción, debemos tener presente quiénes somos y hacia donde deseamos ir, ya que no es lo mismo llegar a cualquier lado, que llegar al sitio donde realmente quieres acabar, hay que plantearse como queremos que sea nuestro futuro y que necesitamos para que sea posible, trabajar constantemente y conseguir las herramientas necesarias para construirlo y avanzar en el camino que nos lleve hasta el.

No hay mas ciego que el que no quiere ver, es necesario pararse un momento y mirar hacia adelante, observar hacia dónde vamos ¿Es el camino correcto?, en caso afirmativo, abrocharse los cordones y continuar a paso firme, en caso negativo se hace urgente rectificar y orientar la brújula hacia otra dirección, pues la vida es un camino de recorrido único, no existen dobles oportunidades o senderos bifurcados, solo tenemos una oportunidad y tiene duración determinada, por eso no podemos dormirnos en mitad del camino, podemos descansar y reflexionar, pero no quedarnos quietos, debemos avanzar incesantemente a ritmo certero y con nuestro objetivo siempre en mente, ¿Nos conformaremos con andar sin más por cualquier camino que encontremos?, creo que nuestras metas nos impiden tal acto de cobardía y el único resultado posible puede ser tremendamente nefasto. Creo que el camino que elegí hace años es el correcto, admito que tuve que rectificar, sin embargo eso me ayudó a encontrar donde quería llegar, me ayudó a encontrar mi destino, recorría un camino incierto, pero a día de hoy puedo encontrarme satisfecho de los pasos que doy y estoy seguro de que cuando llegue a mi destino, será el sitio donde efectivamente quería llegar… ¿Y tú?, ¿has examinado o valorado tu recorrido?, siempre se puede rectificar si deseas ir a pie, pero recuerda, si en algún momento piensas en acortar, hay trenes que solo pasan una vez en la vida, intenta llegar a la estación y estar preparado a tiempo para cuando pase.


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